Las escenas adicionales de la secuela de ‘Los Vengadores’ se ruedan con Pocket Cinema Camera
‘Vengadores: La Era de Ultrón’
Cuando Tony Stark intenta reactivar un programa para el mantenimiento de la paz, las cosas no salen según lo planeado, y los héroes más poderosos de la Tierra deberán ponerse a prueba, ya que está en juego el destino del planeta. Con la aparición del villano Ultrón, Los Vengadores se enfrentarán a la tarea de impedir sus terroríficos planes. Sin embargo, no tardarán en surgir extrañas alianzas y giros inesperados que sentarán las bases para esta epopeya.
Esta segunda entrega difiere bastante de la película original. «La primera se trataba de aunar esfuerzos, mientras que en esta queda de manifiesto una división que se refleja en el tono del guión», explica el DoP Ben Davis. «La narrativa es mucho más oscura y amenazadora, de modo que el enfoque visual fue más crudo y prosaico».
El largometraje requirió una gran cantidad de escenas adicionales y Davis buscaba una cámara cinematográfica digital compacta y de gran calidad para las escenas más peligrosas. «Me gustaron mucho las tomas que Anthony Dodd-Mantle logró obtener en Rush mediante rigs para cámaras pequeñas, especialmente a la hora de montarlas en lugares fuera de lo común», reveló. «Decidí probar una Pocket Cinema Camera después de encontrarme con un técnico en imágenes digitales amigo mío que recientemente había adquirido una y no hacía más que alabar sus bondades. Para mí fue una elección obvia, ya que los factores más importantes eran la latitud y el tamaño. De repente me encontré con una cámara que no solo permite grabar imágenes en formato RAW con una calidad de 12 bits, sino que también ofrece una latitud que está a la altura de los modelos cinematográficos digitales de alta gama».
«Hay dos escenas de batallas importantes durante la película, una al comienzo y la otra pasada la mitad, y realmente queríamos rodarlas como si un corresponsal de guerra estuviera realizando una cobertura desde una zona en conflicto. Necesitábamos un modelo liviano que pudiéramos colocar en diversos lugares del set de grabación y que ofreciera más de 12 fotogramas de material HD de buena calidad para intercalarlo con las imágenes tomadas con la cámara principal. Para ello, colocamos ocho Pocket Cinema Cameras con objetivos tipo «pancake» de 14 mm o de distancia focal variable de 12-35 mm en diferentes puntos de impacto situados en varios lugares del set de grabación. Supongamos por ejemplo que un camión explota y vuela por los aires, y queremos capturar el momento en que cae sobre un automóvil. Entonces poníamos una de las cámaras en una carcasa metálica pequeña y la colocábamos sobre el automóvil. En otro caso, la montamos sobre un tanque, porque logramos sujetarla a un brazo articulado que podíamos atornillar a cualquier parte del mismo».
«Siempre pensé que sería bueno tener una Pocket Cinema Camera, pero a decir verdad he terminado usándolas mucho más de lo esperado», concluyó Ben. «Lo atractivo de esta cámara es la relación entre su tamaño y la calidad que ofrece. Podemos intercalar el material grabado durante más tiempo entre las escenas principales y, por lo tanto, este modelo es mucho más útil que otras versiones compactas.»