Las grandes ganadoras de esta edición han sido ‘And Their Children After Them’ y ‘The girl with the needle’ El Festival de Cine Europeo de Sevilla ha anunciado la película ganadora de su 21 edición. Se trata de ‘And Their...
La formación será gratuita y se desarrollará en diferentes sesiones, entre el 11 y el 14 de noviembre Abierta la convocatoria para inscribirse en el taller de formación para el sector audiovisual: el “Taller básico de Coordinación de Producción de...
El Festival se expande con cuatro nuevas secciones y la incorporación de ocho sedes El Festival de Cine Europeo de Sevilla arranca de nuevo con la intención de convertirse en un actualizado punto de encuentro entre público y profesionales del...
El cartel de la 16 edición del Festival es obra de la artista Ana Langeheldt. Para José Luis Cienfuegos, director del SEFF, “la variedad y el riesgo formal de todas las propuestas apunta a un recambio generacional y a un cine de nuevas maneras, más libre. Cineastas militantes que utilizan referentes cinematográficos, literarios y artísticos que no tenían cabida hace poco más de una década”. Como en 2018, “la mayor parte de los directores seleccionados acudirán a Sevilla para la que será la primera proyección en España de sus películas y participar en los numerosos encuentros con el público que celebra el Festival”.
Con una programación de más de 200 títulos, el Festival de Sevilla llega a su edición número XIV mostrando un cine europeo en constante evolución. El festival ofrecerá 20 estrenos mundiales, 185 estrenos nacionales de 42 cinematografías participantes (32 europeas y 10 de países no europeos) en una cita en la que se integran público, creadores, profesionales y programadores.
El próximo 10 de noviembre se estrena en el Festival Europeo de Sevilla el film Análisis de sangre azul, codirigido por Blanca Torres y Gabriel Velázquez. La película compite en la sección “Resistencias” dentro de este Festival, que programa el cine más arriesgado de Europa. Un científico adelantado a su época. Un inglés con aires de grandeza. Un valle perdido en los Pirineos. Unos habitantes olvidados. Un sanatorio mental repleto de enfermos. Una cámara de 16mm en el año 1933. Esos son los ingredientes de esta película.