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Test de la Blackmagic Pocket Cinema 4K

11/01/2019

A cargo de la Directora de Fotografía Elisabet Prandi

Autora: Elisabet Prandi (Directoras de Fotografía)

Cuando se me planteó realizar las pruebas de esta cámara pensé que sería muy buena idea probarla para un futuro proyecto documental que debo fotografiar próximamente en una zona boscosa y montañosa. Para este proyecto estoy buscando una cámara con gran calidad en las bajas luces, muy ligera y con la posibilidad de poder operar y manipular la cámara sin la ayuda de un ayudante o foquista.

Una de mis preocupaciones cuando testeo una cámara es comprobar qué posibilidades me dan las imágenes rodadas en postproducción, y en este caso concreto me interesa principalmente comprobar la gama de grises oscuros y cómo encarar situaciones de subexposición que probablemente surgirán en este rodaje, ya que se trata de paisajes y localizaciones en bosques tupidos y frondosos, interiores con poca luz y exteriores de pueblos poco iluminados de noche y al atardecer.

Esta cámara nos ofrece la posibilidad de rodar en diferentes formatos y de adecuar perfectamente la calidad de la imagen según nuestras necesidades. Los códec de grabación son RAW (DNG) o ProRes. Podemos usar tanto las tarjetas CFast 2.0 como las SD UHS-II.

Con una tarjeta de 64GB tendremos unos 8 minutos a máxima calidad, por lo cual hay que calcular bien el número de tarjetas necesarias, su capacidad y los pertinentes discos duros de almacenaje.

El sensor es de cuatro tercios y la montura Micro cuatro tercios. El factor de multiplicación es de aproximadamente 1,88x y se puede grabar a cámara lenta a 120 fps con resolución 1080p.

La Blackmagic Pocket Cinema 4K es una cámara muy ligera y ergonómica. Tiene una gran pantalla sobre la cual podemos manipular de forma táctil y rápida la mayoría de las funciones.

La pantalla táctil permite enfocar de forma manual sobre la misma pantalla, lo cual es una gran ventaja en este tipo de proyectos y en situaciones en que no contamos con el apoyo de un foquista. El Picking graduable a diferentes intensidades también es de gran ayuda, aunque el zoom de enfoque me resulta personalmente muy corto. De todas maneras, si queremos un enfoque progresivo, es aconsejable el uso de un follow focus.

Hay que ir con un poco de cuidado, ya que es fácil que pasemos de 25 i/s a 60 i/s sin darnos cuenta.

El cambio de diafragma es posible tanto táctilmente desde la pantalla como con una anilla en la estructura de la cámara. Hay que tener en cuenta que los cambios de diafragma durante el plano son difíciles de efectuar de forma gradual con algunas ópticas como la Lumix 12-35 f: 2,8, ya que la variación se efectúa paso a paso produciendo los molestos trompicones de exposición. La falta de estabilización interna de la cámara hace que sea aconsejable usar ópticas con estabilizador, sobre todo si vamos a hacer cámara en mano de forma recurrente.

Blackmagic pocket cinema 4k DNG (RAW) versus ProRes 4:2:2 400 ISO from Camera & Light on Vimeo.

Blackmagic pocket cinema 4k DNG (RAW) versus ProRes 4:2:2 1250 ISO from Camera & Light on Vimeo.

La ventilación se encuentra principalmente en la parte de abajo de la cámara y es posible que la tapemos con la mano cuando la sostenemos y por tanto que la cámara no ventile tan bien como debería.

Las baterías duran unos 40 minutos (25 ó 30 minutos en exteriores con bajas temperaturas y humedad); es pues aconsejable tener muy en cuenta este punto y prever varias baterías (8/10) o bien algún sistema de alimentación externa más potente, sobre todo en los proyectos documentales en exteriores y con pocas conexiones eléctricas a mano.

Blackmagic pocket cinema 4k DNG (RAW) versus ProRes 4:2:2 Escala de ISO from Camera & Light on Vimeo.

Blackmagic pocket cinema 4k RAW velas from Camera & Light on Vimeo.

El aspecto de la cámara es muy familiar, lo cual nos permite entablar una relación rápida con los posibles protagonistas y abrirnos puertas más rápidamente.

A partir del análisis de las imágenes filmadas, creo que es una cámara que da muy buenos resultados si la utilizamos a ISO 200, 400, 1250 y 1600. También se puede utilizar a 3200 u otra ISO en caso de necesidad. En estos casos, deberemos usar algún reductor de ruido en postproducción, lo cual a mí no me incomoda en absoluto.

En las altas luces hay que tener cuidado, ya que se queman fácilmente y no admite bien la sobrexposición. En las altas luces es muy notable el cambio de calidad entre el RAW y el ProRes 4:2:2.

Si nos fijamos en la zona de altas luces, vemos que esta zona ya está “cortada” a +1 y resulta por lo tanto difícil recuperar información.

En el caso de altas luces sería interesante que la cámara contara con la posibilidad de filtros neutros, pero como no es el caso, es importante tener a mano un filtro de variación neutra variable en nuestro material de cámara para adecuar al máximo el ISO y el diafragma en situaciones de mucha luz.

En las bajas luces la calidad es notable, sobre todo en RAW y en ProRes 4:2:2 HQ, como se puede apreciar en las diferentes pruebas. Admite fácilmente 2 diafragmas de subexposición.

En la subexposición, principalmente en ProRes 4:2:2, las sombras toman una ligera dominante magenta muy fácilmente corregible en postproducción.

Como podemos ver en -3, el límite de las zonas oscuras no es totalmente recto y por lo tanto nos permite recuperar información en esta zona.

En conclusión, la Blackmagic Pocket Cinema 4 K es una buena alternativa para este tipo de trabajos y creo que la relación calidad / precio es impresionante, teniendo en cuenta que también adquirimos junto a la cámara el programa DaVinci Resolve Studio.